Sulfato Amónico Cristalino 21%

El fertilizante de sulfato amónico cristalino es especialmente recomendado en suelos sódicos-salinos. El principal objetivo es mejorar las condiciones de desarrollo de la planta.

Dado el efecto acidificante del sulfato amónico cristalino, se genera una movilización del calcio y el potasio, así como una contribución a solubilizar el fósforo existente en el suelo en forma no asimilable. El sulfato amónico cristalino es utilizado en la agricultura convencional, sobre todo en cultivos menos rentables y como fuente importante de nitrógeno acompañada de azufre.

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Características del sulfato amónico cristalino 21%

El sulfato de amonio cristalino fue uno de los fertilizantes nitrogenados más utilizado para la producción de cultivos. Hoy en día es menos utilizado, pero es realmente valioso cuando se necesita agregar nitrógeno (N) y azufre (S), satisfaciendo los requerimientos nutricionales del cultivo en la fase de crecimiento.

La forma de amonio es asimilada de manera muy rápida por los cultivos, aunque en volúmenes masivos puede llegar a ser fitotóxica para la planta.

Características del sulfato amónico cristalino 21%
Cómo se produce el sulfato amónico cristalino 21%

¿Cómo se produce el sulfato amónico cristalino 21%?
El sulfato amónico cristalino ha sido producido hace más de 150 años. En un primer momento, se realizó con amoníaco liberado durante la fabricación de gas de carbón (utilizado para iluminar ciudades) o de carbón de coque, usado para producir acero.
Está elaborado a partir de una reacción de ácido sulfúrico y amoníaco caliente, siendo el tamaño de los cristales resultantes determinado mediante el control de las condiciones de reacción. Una vez alcanzado el tamaño deseado, los cristales son secados y se tamizan en tamaños de partícula específicos. Algunos materiales están recubiertos con un acondicionador para reducir el polvo y el apelmazamiento.
La presencia de cristales de azufre y de amonio hace que el color final del producto sea blanco.

Sulfato amónico cristalino 21% en uso agrícola

El sulfato amónico cristalino no es un abono ecológico, puesto que su proceso se obtiene por transformaciones de síntesis y, por tanto, no se halla recogida en la normativa europea de agricultura ecológica.

Otra característica de este tipo de fertilizante es que, al estar presente la fracción nitrogenada en forma de amonio, el sulfato de amonio es habitualmente utilizado en suelos muy húmedos para la producción de arroz, en donde los abonos a base de nitrato no son una buena alternativa debido a las pérdidas por desnitrificación.

Aplicación del fertilizante de sulfato amónico cristalino 21%
Este tipo de fertilizante puede aplicarse de diferentes maneras: de forma sólida y de forma líquida. Si optamos por su aplicación en sólido, habremos de considerar que se puede combinar con cualquier otro abono sin problemas mayores. El único abono que habremos de evitar es aquel que contenga cal activa.
Si preferimos su aplicación en líquido, tendremos que optar por su uso en el agua de riego, sin importar el modo en el que este se realice.
Por otro lado, habitualmente se añade una solución con sulfato de amonio a las soluciones de herbicidas post-emergentes para optimizar su eficacia en el control de malezas. Esta práctica de incremento de eficacia del herbicida con sulfato de amonio es especialmente positiva cuando el agua a utilizar contiene concentraciones significativas de calcio, magnesio, o sodio. Para ello frecuentemente se utiliza sulfato de amonio con grado de alta pureza evitando el taponamiento de las boquillas de aplicación.
Tal y como se comentaba, el sulfato de amonio se disuelve de manera muy rápida en sus componentes amonio y sulfato. Si perdura en la superficie del suelo, el amonio es susceptible a pérdidas gaseosas en condiciones alcalinas. En estas situaciones, se aconseja la incorporación del material en el suelo lo antes posible o la aplicación previa a un riego o una precipitación prevista.

Cuándo utilizar abonado con sulfato amónico cristalino 21%
El sulfato de amonio cristalino es utilizado principalmente en aquellos cultivos que precisan de nitrógeno (N) y azufre (S) para satisfacer los requerimientos nutricionales de plantas en crecimiento.
Debido a que tan solo contiene el 21% de N, existen otros fertilizantes con una mayor concentración y más económicos para manipular y transportar. Sin embargo, suministra una excelente fuente de azufre que tiene numerosas funciones en las plantas, incluyendo la síntesis de proteínas

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